Transporte, producción y almacenamiento de comida
Transporte y producción de alimentos en la empresa
Los productos se transportan desde el punto A hasta el punto B en las empresas, lo cual puede realizarse mediante carretillas elevadoras de palés, pero también mediante transportadores que recorren toda la fábrica e incluso a través de un sistema de tuberías. En este sector, existen varios aspectos que se deben tener en cuenta en la industria de alimentos y bebidas, especialmente cuando el transporte puede estar en contacto directo con los alimentos.
Aire comprimido con contacto indirecto con los alimentos
Los productos se transportan por toda la fábrica, por ejemplo, mediante un transportador de banda u otras máquinas que desplazan los productos. Tenga en cuenta que un sistema seguro debe cumplir con la certificación BRC Food 8 y la norma ISO 8573-1:2010. El sistema de aire comprimido consta de varios elementos esenciales en el proceso, como compresores (de tornillo), calderines a presión y filtración, para garantizar un aire comprimido limpio.
Aire comprimido para enfriar y congelar alimentos
El aire comprimido se utiliza para enfriar y congelar productos perecederos almacenados en el almacén, como frutas y verduras. Esto evita que los productos se echen a perder antes de llegar al consumidor final. No solo prolonga la vida útil del producto, sino que su apariencia también desempeña un papel importante para el consumidor a la hora de tomar la decisión de compra.
El consumidor probablemente no comprará un producto si este parece menos atractivo, incluso si la manzana o la patata siguen siendo de buena calidad. Esto también tiene un impacto indirecto en el medio ambiente, ya que se desechan menos productos al enfriar y congelar. Como resultado, menos productos llegan a los vertederos, donde de otro modo se descompondrían lentamente. Para las empresas, esto también supone un ahorro de costes, puesto que se desperdicia menos alimento. Por lo tanto, la congelación beneficia tanto a la empresa como al medio ambiente.


Aire comprimido en contacto directo con los alimentos
El aire comprimido también se utiliza para transportar productos a través de un sistema de tuberías, especialmente productos ligeros en forma de polvo o líquidos. Por ejemplo, en una lechería, la leche en polvo se transporta a través de un sistema de tuberías. Es importante que el aire comprimido esté libre de aceite y condensado, ya que este producto se utiliza como producto final para el consumidor. De esta forma, se mantiene la pureza del producto y el sistema de tuberías permanece libre de aceite y condensado. Recomendamos cumplir con los requisitos de la norma ISO 8573-1 Clase Cero para asegurar que el sistema sea seguro.
El aire comprimido también puede utilizarse para suministrar oxígeno o elaborar productos. Un ejemplo es la piscicultura, donde los peces necesitan oxígeno para sobrevivir, el cual se bombea al calderín mediante aire comprimido. Es fundamental que el aire comprimido esté libre de aceite, de lo contrario los peces podrían morir. En la producción de alimentos y bebidas, el aire comprimido debe estar libre de aceite, ya que entra en contacto directo con el producto final. Ni el aceite ni el condensado deben entrar en el producto, porque podría resultar peligroso para el usuario final.
El aire comprimido también se emplea en procesos de fermentación, como el yogur. Durante este proceso se añade oxígeno para permitir que las bacterias fermenten. El aire comprimido exento de aceite es crucial, ya que las bacterias mueren si hay aceite presente en el oxígeno, incluso en pequeñas cantidades, lo que provocaría el fracaso del proceso de producción. En sectores como el marítimo o en plataformas petrolíferas, se elaboran alimentos enlatados para garantizar una larga vida útil. En este caso, es importante que el oxígeno y el nitrógeno estén separados y que el aire comprimido esté 100 % libre de aceite.
En la industria de las bebidas, el aire comprimido también desempeña un papel a la hora de llenar bebidas en envases o botellas. Por ejemplo, durante el embotellado, las bebidas se vierten en botellas a través de una máquina, y otra máquina coloca las tapas. En este proceso, la calidad del aire comprimido debe cumplir con los estándares establecidos según la ISO 8573-1, con un requisito mínimo de clase 2.2.1.
Sistema de tratamiento de aire comprimido
Las normas ISO desempeñan un papel importante en este sector. Por lo tanto, es esencial saber qué productos necesita para alcanzar la clase requerida en su empresa. En el diagrama, puede ver qué combinación proporciona una clase determinada. Por ejemplo, si compra un secador de adsorción OFAG3, cumplirá con la norma de clase cero.